• El diputado provincial socialista Daniel Bravo ha trasladado a la Diputación la necesidad de realizar un estudio pormenorizado sobre la calidad del agua en toda la provincia para abordar una preocupación que es prioritaria para la ciudadanía de Segovia. 
  • Con este estudio, el Grupo Socialista busca atender la necesidad urgente de resolver los problemas en cuanto abastecimiento y calidad del agua que existen en muchas zonas de la provincia de Segovia. Garantizar la calidad del agua no solo es crucial para proteger la salud humana, preservar la biodiversidad de los ecosistemas acuáticos y terrestres y garantizar la sostenibilidad de los recursos hídricos para las generaciones futuras. Es una responsabilidad compartida que requiere un compromiso colectivo, que tiene que empezar por las instituciones, para desarrollar acciones decisivas que resuelvan los desafíos actuales y futuros relacionados con el agua.

Segovia, 27 de marzo de 2024.-  El Grupo Socialista ha trasladado a la Diputación la necesidad de realizar un estudio pormenorizado sobre la calidad del agua en toda la provincia para abordar una preocupación que es prioritaria para la ciudadanía de Segovia.

El diputado provincial socialista Daniel Bravo, durante el turno de ruegos y preguntas del pasado pleno en la Diputación, ha puesto encima de la mesa “un problema que afecta a toda la provincia, tanto en calidad como en abastecimiento”. Por ello, es necesario “realizar un estudio detallado sobre la calidad, la capacidad de almacenamiento del agua y el estado en que se encuentran las infraestructuras hidráulicas en Segovia, que contribuya a la protección de la salud pública y al cuidado del medio ambiente”.

Con este estudio, el Grupo Socialista busca atender la necesidad urgente de resolver los problemas en cuanto abastecimiento y calidad del agua que existen en muchas zonas de la provincia de Segovia.

Asimismo, Bravo ha recordado que en el año 2017 se aprobó por unanimidad en la Diputación una moción del Grupo Socialista sobre la posibilidad de crear un Consorcio Provincial del Agua. “Desde entonces no hemos tenido noticias sobre los pasos que se han dado en esta dirección”, ha asegurado, “por lo que pedimos al equipo de Gobierno que nos informe sobre las acciones que se han llevado a cabo en este sentido”.

“En un momento de emergencia climática, todos tenemos que tomar conciencia de la necesidad de integrar el conocimiento científico en la nueva planificación hidrológica, que ha de ser responsable con los límites cada vez más críticos del recurso. Por eso, entre todas las administraciones tenemos que asegurar el buen estado de las masas hídricas, integrar los conceptos de ahorro y eficiencia en el uso del agua, completar el ciclo de saneamiento, la depuración, garantizar el abastecimiento y la calidad, como bases imprescindibles para dotar de seguridad y bienestar a las generaciones venideras en lo que respecta a un recurso natural que es imprescindible para nuestra supervivencia y que  cada vez está más amenazado”, ha reflexionado Bravo.

En definitiva, garantizar la calidad del agua no solo es crucial para proteger la salud humana, preservar la biodiversidad de los ecosistemas acuáticos y terrestres y garantizar la sostenibilidad de los recursos hídricos para las generaciones futuras. Es una responsabilidad compartida que requiere un compromiso colectivo, que tiene que empezar por las instituciones, para desarrollar acciones decisivas que resuelvan los desafíos actuales y futuros relacionados con el agua.