• “Con esta medida se permite a los consistorios y las autonomías realizar obras necesarias para mejorar la calidad de vida de sus vecinos, algo que el Gobierno del Partido Popular prohibió para que el Estado pudiera cumplir con su déficit, poniendo un yugo a los ayuntamientos que, aún haciendo bien su trabajo, no podían reinvertir su superávit en sus municipios”, explica la alcaldesa de Cabezuela y candidata al Senado del PSOE por Segovia, Ana Agudíez.
  • Estas inversiones financieramente sostenibles deben tener una vida útil igual o superior a cinco años y permitir, durante su ejecución, mantenimiento y liquidación, dar cumplimiento a los objetivos de estabilidad presupuestaria y deuda pública. Se pueden destinar a la prestación de servicios esenciales y a la mejora de los sistemas productivos y de los diversos sectores.
  • Gracias a esta medida se pondrá de nuevo en marcha la economía en las localidades que hasta ahora han tenido que contener su inversión porque no se lo permitía el Gobierno popular, “y eso es positivo, porque con las nuevas obras se podrán prestar mejores servicios o aumentar los que se ofrecen, se creará empleo y se recuperará la economía local”, afirma Agudíez.

El BOE ya ha publicado el Real Decreto-Ley aprobado por el último Consejo de Ministros que permitirá a las entidades locales y a las comunidades autónomas destinar el superávit presupuestario de 2018 a inversiones financieramente sostenibles este año. “Con esta medida se permite a los consistorios y las autonomías realizar obras necesarias para mejorar la calidad de vida de sus vecinos, algo que el Gobierno del Partido Popular prohibió para que el Estado pudiera cumplir con su déficit, poniendo un yugo a los ayuntamientos que, aún haciendo bien su trabajo, no podían reinvertir su superávit en sus municipios”, explica la candidata de Cabezuela, Ana Agudíez.

Recuerda la también candidata al Senado por el PSOE de Segovia que la Ley de Estabilidad Presupuestaria determina que el saldo positivo de las administraciones tiene que ser destinado a amortizar deuda, por lo que durante años no se ha podido reinvertir el superávit en mejorar los servicios que se ofrecen a los vecinos. Sin embargo, se permite la excepción de, mediante la aprobación de un Real Decreto-Ley, destinar parte del superávit a inversiones financieramente sostenibles. Posibilidad que ha habilitado ahora el Gobierno socialista.

Estas inversiones financieramente sostenibles deben tener una vida útil igual o superior a cinco años y permitir, durante su ejecución, mantenimiento y liquidación, dar cumplimiento a los objetivos de estabilidad presupuestaria y deuda pública. Se pueden destinar a la prestación de servicios esenciales, como pueden ser el alcantarillado, el abastecimiento de agua, la recogida de residuos o el alumbrado público; y a la mejora de los sistemas productivos y de los diversos sectores, como infraestructuras de transporte, centros docentes, asistencia social primaria, recursos hidráulicos o sociedad de la información, entre otros ámbitos.

Además, añade Agudíez, “la norma aprobada por el Consejo de Ministros también contempla que los ayuntamientos y las comunidades autónomas puedan disponer de más tiempo para desarrollar estas inversiones, en concreto, permitirá que la ejecución aprobada en 2019 pueda terminar de ejecutarse en 2020”.

Gracias a esta medida se pondrá de nuevo en marcha la economía en las localidades que hasta ahora han tenido que contener su inversión porque no se lo permitía el Gobierno popular, “y eso es positivo, porque con las nuevas obras se podrán prestar mejores servicios o aumentar los que se ofrecen, se creará empleo y se recuperará la economía local”, concluye Agudíez.